Enterramos la sardina y dijimos adiós al carnaval

El paseo fúnebre adentrándose en la calle Calcio

El miércoles de ceniza en nuestro barrio tuvo una habitual protagonista: la sardina, ella y los vecinos y vecinas (especialmente l@s más pequeñ@s) nos entusiasmaron de alegría a pesar de ser un adiós a la popular fiesta del carnaval.

Unos ayudantes muy especiales

Las calles del barrio han escuchado la música del grupo "La Cosa del Pantano" y se han poblado de gente desde la Avenida de Los Rosales hasta el final en la calle Estefanita, donde la Asociación de Vecin@s ha invitado a quien quisiera a unos frutos secos y refrescos. Los niños y niñas se lo han pasado genial incluso un grupo de valientes se ha puesto manos a la obra y portó durante un buen trecho la caja de la sardina. 

Así nos gustan los vecinos: colaboradores y participativos, por ello desde la asociación queremos felicitarles a todos, también a los papis, mamis, abuelos y abuelas que han agarrado la mano a sus peques y se han puesto en marcha para despedir a la sardinita.

Así ardía la sardina...

En varias ocasiones la procesión fúnebre ha parado para que el Padre Enrique (que se postula para Santo Padre) leyera una serie de responsos festivos y, a la par, reivindicativos... y es que el carnaval no es carnaval si no tiene el toque crítico y más en un momento en el que nuestras sociedades sufren recortes y políticas que poco ayudan al ciudadano de a pie.

También se ha quemado algún sobre, y es que esa crítica no puede permanecer ajena a los casos de corrupción que sacuden a nuestro país.