El próximo
domingo tendrán lugar unas nuevas elecciones generales, desde nuestra entidad
queremos promover la participación responsable en estos comicios y lejos de la
tan manida expresión “todos son iguales” proponemos una reflexión seria antes
de meter nuestra papeleta en la urna.
Creemos que
la ciudadanía no se debe resignar ante los enormes puntos negros que nuestra
democracia nos presenta de forma regular, al contrario, pensamos que debe
participar puesto que uno de los principales valores del sistema es que
cualquier voto vale lo mismo, independientemente del pueblo de nuestra
comunidad autónoma o del barrio de nuestra ciudad en el que se resida.
Precisamente esa igualdad en la decisión es la que nos hace corresponsables del
resultado.
No queremos
entrar en guerras de siglas, no es nuestro objetivo. Pero sí entendemos que
como entidad que está en contacto con las administraciones, que realiza actividades
diversas y que colabora junto a múltiples
colectivos con dificultades evidentes, conocemos bien y de forma global los
problemas a los que nos enfrentamos como sociedad.
Pedimos un
voto que crea en la democracia, y en los derechos y libertades de la ciudadanía,
y no en leyes restrictivas de los derechos individuales que, bajo el parapeto de
la seguridad ciudadana, sirvan para controlar cualquier oposición a las medidas
que la administración pone en marcha sin aceptar el más mínimo acuerdo. Pedimos
un voto que crea en las soluciones reales a los desahucios o la pobreza
energética con la acción directa de las instituciones. Pedimos un voto
comprometido con lo público y sus servicios sanitarios y educativos, con los
dependientes y sus familiares, con los parados y con aquellos que viven en
precario incluso teniendo un empleo. Pedimos un voto que defienda antes a
trabajadores y pequeños empresarios que a los grandes capitalistas y
banqueros. Creemos en un voto que
promueva una economía sostenible y no depredadora, que entienda que la defensa
del Medio Ambiente no es simple “postureo” y precisa de una mayor implicación
de los gobiernos pensando más en el futuro que en el ahora. Creemos en un voto
que propugne la igualdad real entre hombres y mujeres, que entienda la
violencia de género como una lacra social que no puede quedarse en cifras de
muertas o en minutos de silencio. Creemos en un voto sensible con los animales,
con la cultura y las culturas, con el ocio, con la transparencia y la
participación ciudadana. Creemos en un voto que fomente el respeto y la
dignidad humana.
Por ello,
pedimos que nuestra responsabilidad se materialice en el apoyo a quienes tienen
propuestas para las múltiples situaciones que nos preocupan de forma colectiva,
creyendo en la intervención de las administraciones como factor básico del
reequilibrio socioeconómico y no propiciando ni justificando recortes sociales,
mientras se deja en exclusiva a manos del mercado nuestro futuro.
Creamos en las libertades,
defendamos nuestros derechos,
sintamos la igualdad.